¿Cómo reducir la huella de carbono en casa?
Los científicos y expertos en el clima han advertido que es necesario tomar medidas urgentes y ambiciosas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y evitar los peores impactos del cambio…
De la misma manera, para atajar este asunto, muchos países han decidido limitar la circulación de los coches diésel y gasolina en sus territorios, por tratarse de combustibles altamente contaminantes.
Por ello, en este post vamos a conocer mejor las características de este tipo de vehículos, así como sus ventajas o su presencia en el mercado.
El autogas (GLP) es un gas licuado que puede emplearse como combustible para vehículos. Este carburante se basa en una mezcla de propano y de butano, sometida a altas presiones, para pasar de estado gaseoso a líquido. Al transformarse en estado líquido, el producto reduce notablemente su volumen y puede almacenarse en depósitos de tamaño reducido.
Como hemos visto en anteriores posts, las ventajas del autogas son muy numerosas. En primer lugar, podemos destacar que se trata de un combustible mucho más limpio, sostenible y seguro, si lo comparamos con los carburantes tradicionales (diésel o gasolina). Los coches autogas son capaces de reducir hasta un 24% las emisiones de CO2, hasta un 85% de emisiones de óxido de nitrógeno (NOx) y hasta un 99% de partículas. La DGT califica, de hecho, a los coches autogas con la etiqueta ECO.
Además, si decides cambiarte a un vehículo de autogas podrás beneficiarte de un notable ahorro económico. El precio del GLP es más barato que el de otros combustibles debido, entre otras cosas, a que su carga impositiva es mucho menor que la que se aplica al gasóleo o la gasolina. Así, el ahorro en repostaje puede alcanzar hasta un 40%.
Cabe mencionar que, para asegurar su autonomía, los vehículos autogas se caracterizan por disponer de un depósito bifuel, compatible tanto con gasolina como con autogas. Por defecto, el coche circula con gas hasta que éste se agota. Entonces, el vehículo pasaría a servirse de la gasolina de forma automática e instantánea.
Precisamente por estas y otras ventajas, la demanda del autogas en el ámbito de la movilidad no ha dejado de crecer. Es, a día de hoy, el combustible alternativo más utilizado en todo el mundo.
Lo cierto es que el autogas no es un producto nuevo en el mercado. El GLP comenzó a comercializarse en los años 30, fundamentalmente en mercados regionales. Fue la crisis del petróleo de 1973 la que impulsó la comercialización de este combustible, incrementando la demanda en los mercados internacionales.
La mencionada crisis del petróleo supuso el primer empujón para que comenzaran a desarrollarse nuevos combustibles alternativos para el transporte. Hasta ese momento, existía una fuerte dependencia del petróleo procedente de Oriente Medio y los países occidentales se vieron inmersos en una grave crisis económica. Al mismo tiempo, el precio del petróleo y del combustible no dejaba de aumentar.
El incremento desorbitado de los precios del combustible, junto a los problemas de suministro, hizo que muchos países optaran por reducir su dependencia del crudo apostando por el desarrollo de otras fuentes de energía. Estas circunstancias supusieron un antes y un después para el GLP.
En España, las soluciones GLP para vehículos, conocidas como autogas, no llegan hasta bien entrados los años 80. Al principio, este carburante se utilizaba principalmente en vehículos de servicio público, como taxis o autobuses. Sin embargo, el desarrollo de nuevos vehículos, el incremento de gasolineras GLP y una mayor conciencia medioambiental de los usuarios, han conseguido que el autogas termine por ser uno de los combustibles de mayor crecimiento para turismos y vehículos particulares.
Como decíamos, el autogas (también denominado GLP), es el carburante alternativo más demandado en todo el mundo. Los coches autogas alcanzan una cuota de mercado del 2,7%, frente al 0,6% de los vehículos eléctricos o del 0,4% de los coches GNC (gas natural comprimido). Por cada coche eléctrico se venden cuatro vehículos de autogas.
En 2019, la venta de vehículos GLP en España aumentó un 18%, frente a los datos registrados en 2018.
A día de hoy, alrededor de 25 millones de usuarios en todo el mundo circulan con coches autogas. De ellos, 15 millones se ubican en la Unión Europea y 100.000, en España.
Conscientes del aumento de la demanda de vehículos GLP, cada vez son más los fabricantes que apuestan por comercializar este tipo de automóviles.
En 2019, el coche de autogas más vendido en España fue el Opel Corsa GLP (con un coste aproximado de 12.000€), seguido del Dacia Sandero GLP (coste aproximado: 10.300€), Reunault Clio GLP (coste aproximado: 13.200€), Dacia Duster (coste aproximado: 13.350€) y Dacia Lodgy (coste aproximado: 13.800€).
Entre las novedades del mercado más interesantes, destacan el Opel Mokka X, el Ford Fiesta, los SsangYong Tivoli y XLV o los Subaru Impreza, XV, Levorg o Outback.
Además, el mercado de los coches autogas cuenta con un nuevo actor. Se trata de DR Automobiles, un fabricante italiano fundado en 2006 que trata de labrarse un lugar en el mercado de vehículos español, ofreciendo toda su gama adaptada al GLP. Su modelo más demandado es el DR3 (con un precio que ronda los 17.900€).
Si quieres disfrutar de los beneficios del autogas pero no te interesa invertir en un nuevo vehículo, debes saber que también puedes convertir tu coche convencional a autogas. En España se contabilizan, en la actualidad, más de 800 talleres transformadores de vehículos a GLP. El coste de la transformación puede variar en función del vehículo y del taller. Para que dispongas de una referencia, a nivel orientativo, el coste de la conversión puede oscilar entre los 1.000 y los 3.000 euros.
Si estás pensando en pasarte a un coche de autogas, no debes preocuparte por la autonomía del vehículo o por las posibilidades de repostaje. España dispone de una óptima infraestructura de suministro de autogas y la red de gasolineras GLP no deja de crecer. Actualmente, en nuestro país se contabilizan ya 687 gasolineras GLP y la cifra continúa en aumento.
Además, gracias al aumento de la demanda de coches autogas, cada vez son más los puntos de suministro y las estaciones de servicio que nos permiten repostar GLP. Estos son fácilmente localizables a través de internet. Así, puedes consultar las gasolineras que disponen de autogas en los mapas de los puntos de suministro en España o en páginas web como gasmoción.
La situación de emergencia climática a la que nos enfrentamos exige cambios inmediatos y nos deriva hacia modelos energéticos más limpios. Así, la movilidad sostenible ha pasado de ser una moda a convertirse en un asunto prioritario de la agenda social y política. Las autoridades, de hecho, ya están tomando medidas, limitando la circulación de los vehículos propulsados por combustibles contaminantes o premiando la compra de vehículos limpios a través de subvenciones.
En este contexto, los coches autogas cobran un importante protagonismo. Estos vehículos han conseguido posicionarse como la opción ECO preferida por los usuarios de todo el mundo. Sus tarifas asequibles, unidas al depósito bifuel y a la extensa red de gasolineras GLP, convierten a los coches autogas en una atractiva alternativa de cara a reducir las emisiones derivadas de los desplazamientos. Podemos predecir que, en los próximos años, la venta y las matriculaciones de vehículos GLP continuará su imparable aumento.
Y tú, ¿qué opinas de los coches autogas? ¿Ya disfrutas de las ventajas de contar con un coche autogas? ¿Te estás planteando un cambio?